Vic


Rompiendo mi rutina de limpieza general en casa de todos los sábados, este me levanté con el propósito de visitar el mercado semanal de Vic que tanto me habían comentado.
Esta es una ciudad a la que había siempre pasado de largo, sólo recuerdo pasear por ella un domingo tarde y hace muchos años.
Así que aunque los meteorólogos anunciaban posibles lluvias, hacia allí nos encaminamos.



El trayecto de casa a Vic nos ocupó menos de una hora, pudimos aparcar cómodamente a las puertas del casco antiguo de la ciudad.
No tuvimos que callejear demasiado para encontrarnos con la Plaza Mayor dónde se instala el grueso del mercado.






Tal y como esperábamos éste era bullicioso y con una gran oferta, lo que no creía que aún existiera el voceo de los vendedores hacia el posible comprador...realmente encantador.
Así que no me pude resistir a comprar un par de plantas.



Después de unas horas de paseo y chafardeo y dada la gran oferta de restaurantes que nos encontramos, nos decidimos por ir a almorzar a La Cova de la Cinglera.
Éste ofrecía un menú especial sábados que nos pareció interesante con un precio ajustado.
Cómo siempre hacemos procuramos no pedir platos repetidos y de esta manera compartir.

Y de esta manera dimos por acabado el día en Vic...

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