Verano...

El mister y yo estamos mirando qué hacer para estas vacaciones, yo tengo claro las fechas pero él no.
No obstante las dudas nos vienen con algo que queda muy lejos de nosotros al menos en kilómetros, la erupción del volcán Eyjafjalla en Islandia.

Yo no acostumbro a coger el mes completo de vacaciones, me gusta más poder disfrutar de una semanita de tanto en tanto que se convierte en 9 días por lo cual el posible retraso de un vuelo tiraría por tierra el viaje.
Así que hagamos lo que hagamos será algo que haremos vía tren, barco o coche, lo que reduce considerablemente nuestro radio de acción.

Esta es una situación en la que nos hace tomar conciencia de lo frágil que es nuestro modo de vida, dónde el coger un avión para pasar unos días a miles de kilómetros era hasta ahora nada estrambótico; pero este “toque” de atención me ha parecido importante para dejar de actuar como si la tierra fuera algo segundario en nuestra vida.

Nunca he entendido tanto la frase: Piensa globalmente, actúa localmente.