Tokio blues-Haruki Murakami


Al acabar de leer esta novela he tenido la sensación de haber navegado por un suave río, sin remolinos ni cascadas; pero al finalizar el viaje y echar la vista atrás el río en cuestión era más bravo de lo esperado.

No sabría describirlo de mejor manera, es una novela terriblemente calma pero suavemente se entremezclan sexo, muerte, locura, depresión, juventud, inmadurez, recuerdos y nostalgia.

Supongo que tengo una visión de la sociedad nipona tan calma y la lectura de este libro me la ha reforzado, da la sensación que no pasa nada pero un remolino de sentimientos queda escondido en cada molécula de sus personajes.

Comentarios

  1. Bien, hoy toca hablar del timador nipón.
    Me voy a poner las botas.
    Por desgracia he leído casi todos sus libros publicados en castellano. Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Yo he tropezado con el farsante japonés muchas más.
    Reconozco que los primeros libros me gustaron, eso fue antes de que el samurai de las letras perdiera el juicio definitivamente y se dedicara a robar a libro armado.
    Poco a poco me fui dando cuenta de que en sus novelas de repente los gatos hablaban, los personajes se volvían locos de repente, y ya en la última IQ84 después de llevar la mitad leída de repente aparecen unos diminutos seres malignos, Little People, que estuvieron a punto de lograr que perdiera el control y lanzara el libro por la ventana.
    En fin, los últimos tres o cuatro libros no los he podido acabar, no soy el único por lo que algunos me han comentado, pero somos conscientes de que lo guay, chic y modernísimo de la muerte es decir que este escritor es magnífico.
    Pues para mí no lo es.
    He sucumbido a las campañas de marketing y por fin he visto la luz.
    Si algún día lo veo por la calle lo llevaré retorciéndole el brazo a comisaría para que lo detengan y que me devuelva el dinero que me ha robado.

    Besos.

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  2. Ejem...los últimos cuatro libros no los has podido acabar y aún tienes la santa paciencia de comprarte otro?
    Yo me he leído tres y me han gustado, pero es verdad que tampoco lo recomiendo a bombo y platillo.

    Petó

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  3. No los he comprado (ni robado).
    Hay miles de autores mejores que él pero quien manda no es la calidad sino la mercadotecnia.
    Nosotros somos las víctimas.

    Y me niego a jugar ese papel.

    La gente compra lo que le dicen que compre. Y se lo dicen por muchos sitios.

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  4. Yo no se si es por que estoy rodeada de japos en la ofi, o por la mentalidad tan diferente que tienen pero Murakami no me atrae en estos momentos... eso si.. nunca digo jamás:-))) un besote cari!

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  5. Mi compañero de viaje se leyó uno de este autor...el de "De que hablo cuando hablo de correr" y le gustó muchísimo...Yo soy a la epsera...aún no me he decidido por ninguno de sus libros. De Tokio blues, me han hablado muy bien. Quizá algún día. Y creo que las personas tienen derecho a elegir. Para mucha gente puede que le parezca una chorrada o una cursilería que se lea a Jane Austen, por ejm., y para otros no. Para eso están los colores y los libros. (Nunca lo hago, pero hoy he leído los comentarios anteriores) En algún momento me he sentido "engañada" y cuando me doy cuenta, me enfado muchísimo, y en especial, conmigo misma, por perder el tiempo con dichos libros y lecturas...y mi enfado llega al autor/a.
    No sé...creo que aunque nuestros gustos a veces, vengan condicionados por el mercado, tenemos también el derecho de disfrutar de aquello que nos gusta y no sabemos por qué...Respeto a quienes leen libros de personas que yo no leería jamás. Supongo que eso también es democracia.
    Petó Susana (y perdona que me haya extendido)

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  6. Mmm...me he dado cuenta que con lo rápido que ido escribiendo he cometido varias faltas...Lo siento!! Bss!!!

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  7. Hola María, yo he leído tres libros de este autor. (Todos comentados en el blog)
    Uno de ellos es el que indicas y también me encantó, el segundo una recopilación de cuentos y el tercero el que hoy comento.

    Si que es verdad que disfruté de los tres, cada uno en su linea, ahora tampoco pondría a este autor en el top ten de mis escritores.
    Pero al no ser nada mitómana ya es normal en mí.

    Petó

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