Recordó

El sol empezaba a calentar su piel, notaba claramente como los rayos le penetraban por cada uno de sus poros, estaría solo un momento más ya que tenia claro la delgada línea entre las bondades de su energía y los efectos negativos de una excesiva exposición.
Esto le hizo reflexionar y trasladó más allá ésta premisa.
Recordó cuanto había sufrido el tiempo que aún con un inmejorable currículum le cerraban las puertas de un puesto de trabajo, recordó también el estrés instalado en su vida desde que por fin lo encontró pero se convirtió en un regalo envenenado de la vida.
Recordó que para llegar a ese momento primero tuvo que pasar por la alegría de poder poner un pie en la Universidad y por el vía crucis de ineptos profesores y temarios desfasados.
Recordó como tuvo que vivir con un desbocado corazón y más tarde con uno herido.
Recordó que la delgada línea ante desear y tener se convertía a veces en un abismo difícil de asumir.
Y por fin recordó que si seguía así las bondades del sol se podía convertir en una pesadilla.

Comentarios

  1. Me ha gustado mucho.
    Está muy bien escrito.

    Deberías animarte a escribir más.

    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Todo en su justa medida, ¿verdad?. Lo difícil es saber cuando la sobrepasas. Un beso.

    ResponderEliminar
  3. genial...

    tal cual me has hecho sentir ese sol..

    y esa reflexión tan bien organizada y que comparto..

    eso sí, además de estar de acuerdo con Toro en que te animes más.. le encuentro un tono autobiográfico..

    besos

    ResponderEliminar
  4. Tumbarse al sol a relajarse, pero por la cabeza aparecen historias del pasado que en el fondo no te dejan disfrutar del momento.
    No te cuento como tengo los hombros, del sol del domingo
    Besos
    Emma

    ResponderEliminar

Publicar un comentario