Menú rojo

¿Y por qué no servir un menú monocolor?
En este caso nos podríamos decidir por el apasionado rojo y empezar con una ensalada de jamón y salami con higos, continuar con una pechugas de pollo con costra de parmesano y acabar con una tarta bicolor...todo ello regado con un estupendo vino negro.

Comentarios

  1. Claro, eso es lo más lógico.
    Hace tiempo que lo hago:
    Lunes, menú amarillo.
    Martes, menú verde.
    Miércoles, menú negro.
    Jueves, menú naranja.
    Viernes, menú violeta.
    Sábado, menú blanco.
    Domingo, menú marrón

    y así...

    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Wuaaaaaala...ya decía yo que algo en común teníamos:p

    Petó

    ResponderEliminar

Publicar un comentario